Muy probablemente tu cerebro está sufriendo en este instante y no tienes manera de saberlo ni él de decírtelo, sino hasta que ya es demasiado tarde, cuando empiezas a notar síntomas de Alzheimer y el daño es irreversible.

El cerebro humano evolucionó para buscar alimentos ricos en grasa y azúcar. Pero una preferencia que comenzó como un mecanismo de supervivencia, en nuestros tiempos, donde hay abundancia de éstos, se ha convertido en una compulsión autodestructiva.

La alimentación actual nos está conduciendo a todo tipo de problemas de salud: obesidad, cáncer, diabetes y enfermedades cardiovasculares, habiendo una creciente evidencia de que también desencadena la enfermedad de Alzheimer, actualmente vista por algunos investigadores, como otra forma de diabetes.

Esto tiene enormes y graves implicaciones: el mundo ya se enfrenta a una epidemia de diabetes y la perspectiva de una epidemia paralela con la enfermedad de Alzheimer es, en términos de sufrimiento humano y costo monetario, verdaderamente aterradora.

La situación nutricional está resultando difícil de controlar ya que por un lado, pocas personas necesitan que se les diga que la comida rica en grasas y altos en azúcar es un peligro para la salud y, sin embargo, las ventas de comida rápida se siguen incrementando.

¿Qué se puede hacer? Las campañas de concientización al público para llevar una dieta saludable y revertir la marea de la obesidad, han tenido un éxito limitado. Muchas personas tratan de hacer algo para corregir esta situación, siguiendo la dieta de moda, pero la mayoría lo hacen por motivos estéticos o porque ya presentan problemas de salud.

¿Y qué podemos decir del cerebro?, abandonado a su suerte, a merced de nuestros malos hábitos de alimentación, de los conservadores que contienen los alimentos procesados, del exceso de azúcares y grasas que consumimos, de contaminantes del medio ambiente y todo esto ocurre porque nuestro cerebro no se queja, no tiene receptores del dolor, por lo que no estamos conscientes de su sufrimiento y deterioro hasta que ya es demasiado tarde; así las cosas, no es de extrañar que las enfermedades neurodegenerativas se hayan incrementado de manera dramática durante los últimos años.

Ya es hora de que tengamos como prioridad el cuidado de nuestro cerebro siguiendo una dieta sana, una dieta fácil de implementar, que estemos conscientes del daño que le estamos causando sin darnos cuenta, y que hagamos lo que esté a nuestro alcance para preservar su salud y buen funcionamiento, a fin de evitar que nos empiece a fallar antes que el resto de nuestro cuerpo.

Algunos regímenes alimenticios populares como la dieta Mediterránea y la dieta DASH se enfocan especialmente en prevenir afecciones cardiovasculares e hipertensión.

En “La dieta MIND, Alimentación que Ayuda a Prevenir la Enfermedad de Alzheimer” encontrarás qué es Alzheimer causas, síntomas del Alzheimer y una estrategia de alimentación para la vida diaria fácil de seguir, basada en los últimos estudios científicos, para mejorar tu salud en general y reducir de manera dramática el riesgo de contraer el Alzheimer.

Alzheimer síntomas.

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